Con la Biostar Racing Z370 GT7 por fin vemos algo nuevo, pues el resto de placas base filtradas de los fabricantes más conocidos, prácticamente todas ellas, son idénticas a sus hermanas “pequeñas” con chipset Z270, donde la mayor de las diferencias está en las cajas y los colores empleados en la placa.
La Biostar Racing Z370 GT7 llama rápidamente la atención con un diseño que llama a la vista, aunando el negro y amarillo. El socket LGA1151 se encuentra respaldado por un VRM de 10+2 fases de alimentación unida a cuatro ranuras DIMM que admiten hasta 64 GB de memoria DDR4 @ 3866 MHz junto a tres ranuras PCI-Express 3.0 x16 reforzadas en acero, dos ranuras PCIe, y un almacenamiento en forma de 6x puertos SATA III 6.0 Gbps, quedando prácticamente oculto en el diseño los dos puertos M.2 respaldados por un grueso y agradecido disipador de aluminio para los SSD de gran velocidad, ya que tienen a arrojar temperaturas en torno a los 80ºC.
La información conocida de la Racing Z370 GT7 se completa con una alimentación estándar con un conector ATX de 24 pines junto a un EPS de 8 pines, un Display para mostrar información o cualquier código de error, cuatro botones que nos permiten arrancar el equipo, reiniciarlo, o activar los modos de alta velocidad o bajo consumo energético; y en el panel posterior tenemos un puerto PS/2 combo para ratón y teclado, cuatro puertos USB 3.0, dos USB 3.1, conectores de audio del códec Realtek ALC1220, un puerto Gigabit Ethernet Intel i219V, y dos salidas de vídeo en forma de un HDMI 2.0 junto a un DVI.
vía: Videocardz
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